Salvando a su amigo
Salvando a su amigo
En un rancho alejado de la ciudad, vivió en un tiempo un gaucho el cual estaba acompañado por su perro. A donde iba su dueño iba su mascota. Juntos hacían las tareas que demandaba ser un hombre rural. Como ordeñar a las vacas, alimentar a las gallinas, recoger los huevos que no siempre eran de oro que ponían las culecas, cobijar a los cerdos entre otras funciones del oficio cotidiano campestre. Vicente había quedado solo, pues ya albergaba unos 90 años, sus hijos se habían marchado a forjar su futuro y su compañera Clorinda de toda la vida hacía pocos años se había marchado.
En aquel día de otoño, Vicente y su perro estaban en el río de pesca. En un momento dado el gaucho se quitó sus alpargatas, se arremangó sus pantalones y se alejo por el agua de la orilla, cuando quiso dar cuentas no pudo dar pie y la corriente lo arrastró estrepitosamente. Aunque gritó no había nadie a esa alturas de la madrugada que pudiera ayudarlo. Su perro lo siguió por la orilla hasta metros más abajo, cuando se hubo detenido, inconciente sobre una roca se lanzó sobre el agua deslizándose hacia él, la corriente no pudo vencerlo y mordiendo la ropa de Vicente, no se con que fuerzas, lo arrastró hacia la visible orilla. Como el gaucho había absorbido bastante agua el perro por más que lo lamió no pudo despertarlo, aunque afortunadamente un guarda del lugar pasaba por ahí. Este viendo la situación corrió velozmente logrando asistir al perjudicado. Afortunadamente pudo salvar a Vicente, aún estando a pocos segundos de perecer. Pero el verdadero héroe, había sido su perro.
Autor: Iluminado