Refugios de poetas
Refugios de poeta (al mar)
Me deje abrigar por tu ornamental figura
Eras todo silencio, con mil siglos
Reñidos de historias en tu vientre.
Te invoque con mis ojos a tus espaldas,
Alado de olas cadenas dejaste emerger la voz
Un suave rugido golpeo el tímpano
Y la primeriza gaviota voló a su amanecer.
Cuan robusto te sentí, con toda forma
Enfrentando al cielo, como un segundo edén
Entre tanta tierra celosa de tus aguas.
No recordaré si fui yo o fuiste tú
Quien en fax verbal tantos versos escribiera
Y al correr el viento con su cuerpo de invisible
Al horizonte los poemas se perdieran.