Pájaro de viento...
Quería hilar con mis manos un mundo nuevo y extraño,
tal vez, tallar, pintar o esculpir el edén entre los ojos,
a dos pasos de la muerte, a tres más uno de la vida,
y donde giran las gaviotas,
y donde bailan las calandrias
ahondar de amor mil banderas,
tal vez, si, lijar las paredes de mis huesos,
pulir mi alma, que surja y emane en mil suspiros de luz,
y como una hoja sin rumbo ni peso,
y como un pétalo, sin caminos ni tiempos
acariciar el aire, jugar su infinito,
y como un niño, hijo de los vientos mansos
ser una pandorga de relámpagos en la existencia,
príncipe de mi destino y muerte de las horas.