Entendiendo el amor
Una de las mayores virtudes del hombre es el entendimiento, el discernimiento del ser uno mismo y el ser uno en los demás. Gracias al poder grandioso que ha recaído a la humanidad en su inteligencia es que el individuo ocupa un lugar compartido en la existencia. Entendamos el amor, no solo como una aleación de pareja, sino como el mandato que nos ha dejado el más grande los maestros universales. El padre de todas las ciencias, que demostró dando su vida por los demás este grandioso sentimiento, en respeto a Jesús esta poesía. “Quien ama está a salvo mientras salva las almas de los demás”. Para entender la gran definición del amor y la mejor prosa que se ha creado a su respecto los invito a leer los versículos bíblicos:
1 Corintios 13:4-7
Nueva Versión Internacional (NVI)
4 El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso. 5 No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor. 6 El amor no se deleita en la maldad sino que se regocija con la verdad. 7 Todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
Entendiendo el amor
Amor del corazón en llamas
florece con tus alas mágicas,
que amable es tu refugio
donde anidan las verdades,
tu eres rey de las palabras
que feliz abrazan la sencillez de la vida,
llevas en tu haber el dominio impalpable de lo infinito
y vistes y desnudas cualquier magnitud indescifrable.
Se que habitas el universo del espíritu
donde eres niño y prolongas la eternidad.
¡Oh corazón de niño con el alma anciana!
a tus ojos se encuentran los senderos de la substancia
y todos los faros de la existencia
que esbanecen los intrascendentes lagos de la muerte.
Tu no eres lágrima que truena amor
sino el milagro más fructífero de la creación
ya que en ti, es de ti la sopa sabia
que siempre crece y perdura.